Llucmajor recibió el título de ciudad mediante Real Decreto del 3 de octubre de 1916, firmado por el rey Alfonso XIII y por el ministro de la Gobernación de aquel momento, Joaquín Ruiz Jiménez. Aunque en principio era un título honorífico y político, el municipio experimentaba en esos años una serie de transformaciones que justificaban la distinción.
Los primeros decenios del siglo XX en Llucmajor estuvieron marcados por un fuerte incremento demográfico, acompañado de una etapa de expansión económica. Muchas grandes fincas fueron parceladas y vendidas en pequeñas porciones, dedicadas principalmente al cultivo del almendro. Al mismo tiempo, tuvo lugar una notable industrialización, sobre todo en el sector del calzado.
En paralelo, se produjeron transformaciones urbanísticas destacables. En octubre de 1916 se inauguró el nuevo mercado municipal (antigua Peixateria), obra del arquitecto Jaume Alenyà. Ese mismo mes, el día 5, se inauguró el ferrocarril Palma-Santanyí con estación en Llucmajor (hoy desaparecido, pero con planes aprobados de regreso hacia 2032). Finalmente, el 25 de noviembre de ese año se inauguró la primera central eléctrica, “El Porvenir”, que dio paso al alumbrado público eléctrico.